viernes, 29 de diciembre de 2017

El Lazarillo

"Yo oro ni plata no te puedo dar; más avisos y consejos para vivir mucho te mostraré".

Esta es una de la muchas frases que nos podemos encontrar en este maravilloso libro, " El Lazarillo de Tormes".

Lázaro nació junto al río Tormes, de ahí su sobrenombre. Cuando tenía ocho años, su padre fue acusado de robar trigo en el molino donde trabajaba y condenado a partir en una expedición contra los moros en la que falleció. Lázaro y su madre se fueron a vivir a Salamanca, donde malvivían de lo poco que su madre ganaba cocinando y lavando la ropa de estudiantes y mozos de caballos. Su madre comenzó a tener relaciones con un mozo negro. Al poco nació un hermano mulato. El negro fue condenado por ladrón y quedaron otra vez solos.

Cuando Lázaro se hizo adolescente un ciego le pidió a su madre que le sirviera de guía. Su madre aceptó pensando que Lázaro viviría mejor con el ciego que con ella, pero el ciego era muy avaro y lo mataba de hambre. Un buen día Lázaro no pudo aguantar más y dejó al ciego.

Entre todas estas historias, Lázaro nos contará muchas otras que nos ayudarán a viajar a través del tiempo y poder ver como vivían en aquella época sus personajes.

Os dejo con una de las historias más interesantes que le sucede al Lazarillo, pero si quieres leer el libro completo pincha en el siguiente enlace:




“Cuando salimos de Salamanca llegamos a un lugar que llaman Almorox, estaban recogiendo uvas y un vendimiador le dio un racimo en limosna y como suelen ir los cestos maltratados y también porque las uvas en aquel tiempo están muy maduras, al echarlas a la talega se deshacían. Decidió hacer un banquete, por no poderlas llevar, más que por contentarme que aquel día me había dado muchos rodillazos y golpes. Nos sentamos en una valla y dijo:– Ahora quiero yo usar contigo de una liberalidad y es que ambos comamos este racimo de uvas y que tengas de él tanta parte como yo. Lo repartiremos de esta manera: tú picaras una vez y yo otra. Con tal que me prometas no tomar cada vez más de una uva, yo haré lo mismo hasta que lo acabemos y de esta manera no habrá engaño.


Hecho así el acuerdo, comenzamos tomando las uvas de una en una, mas el traidor cambió de propósito y comenzó a tomar las uvas de dos en dos, considerando que yo debería hacer lo mismo. Pero yo no me contenté con hacer lo mismo que él y empecé a tomar las uvas de tres a tres y como podía las comía.
Acabado el racimo, estuvo un poco con el escobajo en la mano y meneando la cabeza dijo:
– Lázaro, me has engañado: juraré yo a Dios que tú has comido las uvas de tres en tres.
– No las comí así -dije yo- pero ¿por qué sospecháis eso?
Respondió el astuto ciego:
– ¿Sabes por qué creo que las comiste de tres en tres? Porque yo las comía de dos en dos y tú callabas.
A lo cual yo no respondí.”

No hay comentarios:

Publicar un comentario

El Cid

Como podéis ver en este vídeo, "El Cid Campeador" es el personaje principal de un libro de aventuras en las cuales tú, el Cid, ...